Los disturbios en las marchas convocadas hoy en contra del Gobierno de Nicolás Maduro,
para exigir la liberación de tres estudiantes del estado de Táchira
(Andes venezolanos, fronterizo con Colombia), se han cobrado tres
muertos en Valencia, en el estado de Carabobo, justo al cumplirse un mes
del inicio de las protestas contra el Gobierno chavista.
La asistencia multitudinaria a las marchas sorprendió. En la
principal de esas concentraciones, en Caracas, la capital, miles de
personas caminaron desde la Plaza Venezuela hasta las inmediaciones de
la sede de la Fiscalía General de la República. Allí se produjeron las
dos primeras víctimas fatales de las, al menos, 21 que se contabilizan
–además de 300 heridos y unas 1.300 detenciones- como saldo de los
disturbios.
La dirigencia estudiantil de oposición no ha querido pasar por alto
la fecha. Para este miércoles convocó a otra marcha que, originalmente,
debía partir desde la misma Plaza Venezuela en Caracas y desplazarse
hasta la sede de la Defensoría del Pueblo.
La titular de este organismo, Gabriela Ramírez –una ex diputada y
militante del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv)-
desconcertó el sábado a buena parte de la opinión pública cuando, al
presentar un informe sobre las protestas, no solo achacó la mayoría de
las muertes a grupos de oposición, sino que pareció minimizar sin
ninguna investigación las denuncias sobre torturas y malos tratos –hasta
40 casos sustanció el Foro Penal Venezolano (FPV), una organización no
gubernamental constituida por abogados- que cuerpos de seguridad como la
Guardia Nacional dispensaron a detenidos.
La marcha, que pretendía exigir el cese a la impunidad para asesinos y
torturadores, se topó con un primer obstáculo antes de realizarse. El
Gobierno ha establecido como un punto de honor impedir el paso de las
manifestaciones de oposición al municipio Libertador (centro-oeste de
Caracas). Una marcha “de las ollas vacías” el sábado pasado, y uno de
los médicos el lunes –cuando en Venezuela se celebra el día de esa
profesión- ya se vieron bloqueadas por piquetes de agentes antimotines,
desplegados para contenerlas. Los organizadores de la marcha opositora
de hoy mudaron su punto de partida al barrio de Bello Monte, en el
municipio Baruta del área metropolitana, gobernado por un alcalde de
oposición. Pero, al momento de redactar esta nota, se reportaba la
presencia de soldados de la Guardia Nacional y efectivos de la Policía
Nacional que cerraban los principales pasos al casco central de Caracas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario